CONMEMORACIÓN DEL 42° ANIVERSARIO DE LA MASACRE DE TENANGO GUADALUPE
El Centro para la Promoción de Derechos Humanos “Madeleine Lagadec”, junto a familiares, víctimas y la comunidad, conmemoraron hoy el 42° aniversario de la trágica muerte de más de 250 personas indefensas, entre ellas niños, niñas, mujeres y ancianos, durante el operativo militar denominado “TIERRA ARRASADA”. Este suceso, ocurrido en la localidad de Guadalupe y Tenango, fue perpetrado por el Batallón Atlacatl, la aviación y la artillería de la Fuerza Armada de El Salvador.
Testigos relatan que las víctimas, aún con vida, fueron rociadas con gas e incendiadas. Muchos niños fueron cruelmente masacrados, algunos con los brazos cortados y otros decapitados, hasta el punto de no poder distinguir entre la sangre y el gas quiénes eran niños o niñas.
Uno de los sobrevivientes, cuyo nombre no fue revelado, relató cómo su esposa e hijos fueron asesinados mientras él estaba capturado y siendo torturado. Este testimonio plantea la pregunta: ¿Cómo olvidar la historia y las graves violaciones a los derechos humanos cometidas contra la población civil, cuyo único delito fue ser pobre y huir de una muerte anunciada durante los operativos militares?
Días después de la masacre, algunas personas lograron reunir los cuerpos calcinados y enterrarlos en un broquel de añil. Ahora, 42 años después, estas víctimas, al igual que muchas otras a lo largo y ancho del país, no han recibido justicia, no se conoce la verdad y no existe ninguna reparación moral o material. Este es un hecho de impunidad y una deuda pendiente por parte del Estado salvadoreño.
El Centro para la Promoción de Derechos Humanos “Madeleine Lagadec” reafirma su compromiso y dedicación a mantener vivo el recuerdo de todas las víctimas del conflicto armado, dar voz a quienes no pudieron alzarla en el pasado y sostener la lucha por una reparación digna para cada una de las personas que perdieron a un ser querido durante el conflicto armado que azotó el país.
“Quien no conoce su historia, está condenado a repetirla”